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Prof. Juan Pablo Cárdenas: «Los Medios de Comunicación deben servir al pueblo en sus demandas»

Prof. Juan Pablo Cárdenas: «Los Medios de Comunicación deben servir al pueblo en sus demandas»

Publicado por Nicolas Lopez Garrido, agosto 25, 2013

El Prof. Juan Pablo Cárdenas, Premio Nacional de Periodismo 2005 y Director de Radio Universidad de Chile, será uno de los conferencistas de la Mesa ¨Medios de Comunicación y Dictadura¨en el Coloquio Golpe.

Nota Original de Cecilia Espinosa Cortés, Periodista de la  Facultad de Odontología, publicado en http://www.odontologia.uchile.cl/noticias/94119/los-medios-de-comunicacion-deben-servir-al-pueblo-en-sus-demandas

En el marco del Coloquio Golpe, la Vicerrectoría de Extensión de la Universidad de Chile (VEX) y el Laboratorio Transdisciplinar en Prácticas Sociales y Subjetividad (Lapsos) han organizado jornadas de reflexión sobre los 40 años del 11 de septiembre de 1973 y la posterior dictadura militar. Como auspiciadores, colaboran además el Museo Nacional de Odontología, la Iniciativa Bicentenario; Programa de Profesores Visitantes; Campus Juan Gómez Millas; Doctorado en Ciencias Sociales (FACSO); Doctorado en Psicología (FACSO); Departamento de Artes Visuales , Facultad de Artes; Departamento de Teoría de las Artes, Facultad de Artes; Programa de Magister en Psicología Clínica de Adultos (FACSO/Medicina); y el Instituto Francés de Chile.

Durante los días 9, 10 y 11 de septiembre, la actividad, que se ejecutará en el Teatro Nacional Antonio Varas, considera 10 interesantes Mesas cuyos conferencistas invitados conversarán sobre Derechos Humanos y Memoria; Movimientos Sociales; Ciencia y Represión; Arte en/y Dictadura; Movimientos Feministas; Medios de Comunicación y Dictadura; Pueblos Originarios bajo represión; límites de la democracia y El Poder, la política y lo político.

El Prof. Juan Pablo Cárdenas Squella, Premio Nacional de Periodismo 2005, académico del Instituto de la Comunicación e Imagen de la Universidad de Chile (ICEI) y actual Director de Radio Universidad de Chile, participará como invitado a la Mesa Medios de Comunicación y Dictadura, que se encuentra programada para el 10 de septiembre.

Desde su trinchera en «la Radio que piensa» sigue encabezando la más infatigable defensa de la libertad de expresión y de los derechos humanos, como se le ha reconocido en Latinoamérica y Europa. Por ello, y anticipándose a su presencia en el Coloquio Golpe, nos entregó su mirada retrospectiva de los hechos imborrables de ese septiembre rojo, hace 40 años, y cómo la dictadura es una herida abierta que no ha cicatrizado, sino que por el contrario, está más vigente que nunca.

Un Bando y la mordaza

Relacionar los acontecimientos vividos a partir del 11 de septiembre de 1973 con su biografía no es nada ajeno para el Prof. Juan Pablo Cárdenas. Como periodista, recién egresado de la Universidad Católica, para la fecha del Golpe de Estado ya dirigía la Revista Debate Universitario, por lo que el atropello a la democracia y a la libertad de expresión impactó radicalmente en los medios de prensa en general.

«Para el Periodismo y para la vida de quienes recién nos estábamos iniciando en esta actividad, el 11 de septiembre de 19973 vino acompañado de un Bando en que cerró una gran cantidad de medios de comunicación, algunos de los cuales fueron permitidos posteriormente; pero quienes trabajábamos en la Revista Debate Universitario, vimos que nuestra publicación se clausuró, quedamos expulsados, yo el primero como su Director», enfatizó Prof. Cárdenas.

Tras el Bando se activa la diáspora de periodistas, algunos se dirigen al extranjero, otros a Provincias, muchos cambian de actividad y habitan largos períodos de silencio, sin dejar de mencionar que tantos fueron detenidos, secuestrados, torturados, desaparecidos y asesinados.

Como uno de los más emblemáticos y coherentes defensores de la libertad de expresión, el Prof. Juan Pablo Cárdenas recordó que, en 1977, «nos dimos la tarea de fundar medios que después tendrían una gravitación importante en la salida política chilena», porque si bien el, «el Golpe marcó nuestra vidas, significó la introducción más severa a la libertad de expresión y de prensa en la historia del periodismo chileno».

La cultura humeante

En el Chile del miedo, de un Palacio de La Moneda atacado y humeante, de la sospecha y de la traición, el Prof. Cárdenas escogió la quema de libros como la imagen que mejor describe los hechos del 11 de la muerte. Buscando una emboscada irreparable, los militares en el poder organizaron enormes piras de libros en la calle, cuyo mensaje era «poner borrón y cuenta nueva a la cultura«.

El profesional de la prensa también rememoró los hechos que marcaron más brutalmente la situación del periodismo y la cultura, refiriéndose a la detención de numerosos periodistas. La más significativa de todas, dijo, es «el momento mismo en La Moneda el 11 de septiembre, el suicido del periodista Augusto Olivares que antecede al Presidente Allende en esta decisión».

Tras el Golpe, la dictadura militar invadió todos los espacios materiales e inmateriales, aislando a la ciudadanía y provocando su reprogramación mental. Los periodistas, reflexionó el Prof. Cárdenas, «nos habíamos formado en la Universidad con la idea de que el buen periodismo se pone a prueba en los momentos difíciles y, justamente, desde el primer día del Golpe, quisimos seguir trabajando, de modo de romper con el bloqueo informativo impuesto».

Junto al tímido comienzo de la fundación de la Revista Análisis (1977), y su circulación casi al borde de la clandestinidad, el Prof. Cárdenas se convirtió en el Director de uno de los íconos del periodismo en dictadura. Con su apertura, ya en la década del ‘80, llegó a constituirse «como el semanario de mayor circulación en la historia de Periodismo, un medio destinado fundamentalmente a informar sobre lo que acontecía y que callaban los grandes medios de comunicación, promotor de la consciencia social y la movilización, para poner término a la dictadura y denunciar, ante Chile y el mundo, las graves violaciones a los derechos humanos». Además, naturalmente se propuso «fustigar el modelo económico y la implementación, en general, de la dictadura, pero trabajando siempre por la unidad de la oposición para ponerle término», precisó.

La dictadura no se ha ido

Autor del libro «No a Pinochet«, en el 2011, el Prof. Juan Pablo Cárdenas publicó una columna en el Clarín digital donde sostuvo que aunque nos avergonzara reconocerlo, la figura de la dictador estaba (y está) muy presente en la política chilena. «La presencia de la dictadura sigue muy vigente en estos 23 años de post dictadura, como yo le llamo, desde luego presente en el sistema institucional que nos rige, la Constitución de 1980; la Ley Electoral heredada de la dictadura; por el modelo económico, que no ha sufrido contratiempo durante todos estos años, por el contrario, se ha consolidado el sistema capitalista y la desigualdad, especialmente el ingreso de los trabajadores», subrayó.

Estas contundentes manifestaciones del legado de la dictadura, continuó el Prof. Cárdenas, delatan que mucho de esta herencia fue «acogida y asumida en los Programas de gobierno que siguieron al de Augusto Pinochet, en materia de libertad de expresión y de prensa». A juicio del académico del ICEI, «es cierto que ahora no se mata ni se encarcela a los periodistas y se ha hecho algunas reformas al Código de Justicia Militar al respecto, pero no existe un pilar de la democracia que es la diversidad informativa, podemos tener libertad de expresión y todo el mundo puede opinar y decir lo que quiera, pero no hay diversidad informativa», aclaró.

La erosión de la libertad de prensa provocada por la concentración de la propiedad de los medios de comunicación escrita en dos grandes empresas, el duopolio, «donde la Radio no sólo ha sido limitada, sino que extranjerizada como que una empresa española ha comprado más del 40% de dial; en que la televisión tiene contenidos absolutamente uniformados y regidos por los avisadores más que por la orientación ética de quienes las sostienen, en fin, no hay diversidad informativa y tampoco existe desde el Estado estímulo para el desarrollo de una prensa más amplia, pluralista». Toda democracia, añade el Prof. Cárdenas «prohíbe la concentración económica, y aquí se la ha favorecido en estos años; todas las democracias asignan recursos para alentar el desarrollo de nuevos medios de comunicación, aquí se les restringe; todos los gobiernos democráticos destinan recursos de la publicidad estatal para procurar una discriminación positiva, a favor de aquellos con menos recursos, y aquí la publicidad se concentra en los grandes medios de comunicación».

Las deudas se perpetúan

En el ámbito de la cultura, señaló el docente, «no sólo se mantuvo a el IVA a los libros, sino que se elevó la tasa del IVA del 17 al 19%, es decir, desde el Estado, los gobiernos que han sucedido a Pinochet no han procurado servir a un soporte fundamental como el de la diversidad informativa, entonces hay un enorme pendiente en esta materia, lo que tiene consecuencias en la política, en la corrupción paulatina de nuestros dirigentes, en la injusticia económica y social que se perpetúan». Convencido que «los medios de comunicación deben servir al pueblo en sus demandas», lo que hoy vemos, aseguró el Prof. Cárdenas, es cómo los grandes medios sirven a los «intereses creados, a las minorías y a un sistema que dice ser democrático, pero que tiene muchos rasgos autoritarios en todo orden de cosas».

Inmersos en este escenario social, político y cultural, la pertinencia de la reflexión a 40 años del Golpe cobra total importancia. «Lo cierto es que cada septiembre se suceden los coloquios y los eventos al respecto, pero esta fecha de los 40 años de la muerte de Allende y la muerte de nuestro Sistema Republicano es muy significativo, yo creo que todo lo que sirva para llamar la conciencia en términos de que hay un debe pendiente con la democracia y la justicia social, va a ser muy útil», finalizó el Prof. Juan Pablo Cárdenas.